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malaga-barça
malagacf.com el 27-09-2009, 11:27 (UTC)
 El Málaga da la talla pero cae ante un eficaz Barcelona (0-2)


El Málaga Club de Fútbol perdió en la quinta jornada de la Liga BBVA frente al Fútbol Club Barcelona 0-2 en un encuentro disputado en el Estadio La Rosaleda ante 25.246 espectadores. Los malaguistas, con la gran novedad del canterano Manu Torres en el once inicial, dieron la cara en todo momento, aunque encajaron el primer gol en el minuto 38 de partido. El autor del tanto, el delantero sueco Ibrahimovic, que saltó al campo, previamente, sustituyendo al lesionado Henry. En la segunda mitad, los blaugranas sentenciaron por mediación de otro jugador que saltó desde el banquillo, Piqué. El zaguero catalán remató en solitario una falta botada por Xavi para colocar el 0-2 (minuto 58). Además, en los minutos finales, Luque, que había entrado en lugar de Duda, fue expulsado (minuto 85) tras una entrada por detrás sobre Alves. Por otro lado, justo antes del comienzo del encuentro Sergio Scariolo, Carlos Cabezas y Fernando Lacomba realizaron el saque de honor tras conquistar la medalla del oro del pasado Eurobasket en Polonia.

Con la gran novedad de Manu Torres en el lateral izquierdo, el Málaga Club de Fútbol comenzó el encuentro ante el pentacampeón con una actitud muy positiva y llevando la iniciativa. Baha, desde fuera del área, probó fortuna, pero su disparo se fue desviado. Aunque la mejor ocasión del cuadro malaguista fue para Obinna. El nigeriano recibió un pase en profundidad de Duda, se adentró en el área, pero se escoró demasiado y su tiro, al palo corto de la meta defendida por Víctor Valdés, se fue fuera.

El Fútbol Club Barcelona, poco a poco, fue despertando. Los blaugranas comenzaron a tocar y empezaron a aparecer sus estrellas. Messi avisó en una jugada de fantasía (minuto 19) en la que se adentró en el área sorteando a varios zagueros blanquiazules hasta encontrarse con Munúa. Fue el único acercamiento culé hasta que Ibrahimovic saltó al terreno de juego sustituyendo al lesionado Henry. El sueco perdonó una clara ocasión con un disparo blando que debuto sin problemas Munúa. Sin embargo, seguidamente, Ibrahimovic no falló y anotó el 0-1 después de un magistral servicio de Messi.

En la segunda mitad, el conjunto blanquiazul volvió a mostrar una buena imagen, conteniendo al cuadro catalán. Valdo y Forestieri entraron al terreno de juego y aportaron velocidad al equipo, al que le siguió faltando profundidad en sus acciones. El que sí la tuvo fue el Fútbol Club Barcelona, que firmó el 0-2 a través del recién entrado Piqué, que mandó a las mallas el primer balón que tocó tras una falta botada por Xavi. Un mazazo que, practicamente, finiquitó el encuentro. Pero los malaguistas no bajaron los brazos. Un exceso de confianza de Valdés estuvo a punto de convertirse en el 1-2 después de que el meta catalán no pudiera controlar un pase atrás de Puyol. También pudieron recortar diferencias los blanquiazules después de un buen centro de Luque que no encontró rematador. El Fútbol Club Barcelona, por su parte, también pudo aumentar su renta, pero Weligton y Munúa evitaron el 0-3. El propio Piqué tuvo la ocasión más clara para hacer un nuevo gol, pero el defensa mandó arriba, con todo a favor, un buen centro de Pedro.

En el minuto 85 de partido Luque fue expulsado por una entrada por detrás sobre Alves. Previamente, el segundo técnico barcelonistas Tito Vilanova también vio la roja. Al final, derrota para un Málaga Club de Fútbol al que no le bastó la buena imagen para sacar un buen resultado frente a un poderoso Fútbol Club Barcelona, que no brilló en La Rosaleda pero que se llevó los tres puntos gracias a la calidad técnica de sus jugadores.


Ficha Técnica: Málaga C. F. 0 - F. C. Barcelona 2

Málaga: Munúa, Jesús Gámez, Weligton, Cuadrado, Manu Torres, Fernando (Valdo, 46'), Juanito, Xavi Torres, Duda (Luque, 76'), Obinna y Baha (Forestieri, 55').

Barcelona: Víctor Valdés, Alves, Puyol, Chygrynskyi (Piqué, 55'), Abidal, Toure Yaya (Busquets, 78'), Xavi, Keita, Messi, Henry (Ibrahimovic, 28') y Pedro.

Goles
0-1 (38'): Ibrahimovic. 0-2 (58'): Piqué.

Árbitro
Delgado Ferreiro. Amonestó, con cartulina amarilla, a los malaguistas Baha (16'), Duda (67'), y Weligton (69'), y a los barcelonistas Toure Yaya (31'), Ibrahimovic (69') y Piqué (69'). Expulsó, con roja directa, al segundo entrenador del Barcelona Tito Vilanova (75') y al jugador del Málaga Luque (85').

Incidencias
Estadio La Rosaleda, 25.246 espectadores. Partido correspondiente a la quinta jornada de la Liga BBVA de Primera División. Sergio Scariolo, Carlos Cabezas y Fernando Lacomba realizaron el saque de honor tras conquistar la medalla del oro del pasado Eurobasket en Polonia.
 

espanyol-malaga
malagacf.com el 27-09-2009, 11:26 (UTC)
 El Málaga acaba perdiendo un partido que se puso de cara (2-1)


El Málaga Club de Fútbol perdió frente al Real Club Deportivo Espanyol en la cuarta jornada de la Liga BBVA de Primera División. En su primera visita al Estadio Cornellá-El Prat, los malaguistas, que presentaron las novedades de Cuadrado, Mtiliga, Xavi Torres y Fernando, se adelantaron en el marcador a los 28 minutos de partido. El malagueño Fernando fue el autor del 0-1. En la segunda mitad, Ben Sahar (minuto 54) e Iván Alonso (minuto 80) remontaron el partido a favor espanyolista a pesar de que el Málaga pudo sentenciar el encuentro previamente.


El Málaga comenzó metiendo miedo en los primeros compases de partido. Obinna, Baha y Xavi Torres protagonizaron los acercamientos más destacados de los de Juan Ramón Muñiz. También el Espanyol tuvo alguna ocasión. La más clara fue de Coro, aunque Munúa estuvo sensacional y desbarató la acción. Después de que el partido entrara en una dinámica monótona, apareció Fernando para colocar al Málaga por delante. En los últimos minutos de la primera mitad el cuadro periquito apenas inquietó, salvo un disparo cruzado de Callejón y una chilena de Ben Sahar cuyos lanzamientos se fueron desviados.

La segunda parte comenzó con un Málaga frenético. En el primer ataque de los malaguistas Fernando mandó un balón al larguero y, en la misma jugada, Obinna puso a prueba a Kameni, que salvó a su equipo de encajar el 0-2. Una doble ocasión que pudo haber supuesto la sentencia del partido y que dio vida al conjunto catalán. El Espanyol volcado logró, a los pocos minutos, la igualada. Ben Sahar se elevó entre los centrales malaguistas y, de remate certero y picado, logró el 1-1.

Con el empate el técnico del Málaga movió el banquillo buscando más profundidad con la entrada de Edinho y Benachour. Y a punto estuvo de darle resultado. Un buen centro de Obinna desde la banda izquierda no encontró rematador en el área pequeña, a pesar de los intentos por empujar el esférico de Edinho y Baha. Lo que pudo ser el 1-2 se convirtió, en la siguiente jugada, en el 2-1. Iván Alonso aprovechó un desajuste de la zaga costasoleña para, de fuerte y ajustado remate desde fuera del área, colocar el definitivo 2-1.

Aunque el Málaga lo intentó a la desesperada en los últimos minutos -Munúa incluso subió a rematar varias jugadas de ataque- acabó perdiendo un encuentro en el que pudo obtener mejor resultado.


Ficha Técnica: Espanyol 2 - Málaga 1

Espanyol: Kameni, Chica, Forlín, Pareja, David García, Coro, Moisés Hurtado, Verdú, Callejón (Roncaglia, 87'), Luis García (Iván Alonso, 52') y Sahar (Nakamura, 63').

Málaga: Munúa, Jesús Gámez, Cuadrado, Weligton, Mtiliga, Fernando (Edinho, 61'), Xavi Torres (Benachour, 76'), Juanito (Forestieri, 82'), Duda, Obinna y Baha.

Goles
0-1 (28'): Fernando. 1-1 (54'): Sahar. 1-2 (80'): Iván Alonso.

Árbitro
Ayza Gámez. Amonestó, con cartulina amarilla, al local Pareja, y a los visitantes Weligton, Juanito y Duda.

Incidencias
Cornellá-El Prat, alrededor de 35.000 espectadores. Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga BBVA de Primera División.
 

malaga-racing
malagacf.com el 20-09-2009, 19:03 (UTC)
 El Málaga se ve sorprendido por un efectivo Racing (1-2)



El Málaga Club de Fútbol perdió ante el Racing de Santander su primer partido de la temporada en el Estadio La Rosaleda, que presentó una buena entrada con 21.175 espectadores. El equipo cántabro se adelantó en el marcador a los 36 minutos a través de Arana. Duda, de magistral falta directa, logró el empate en la segunda mitad (minuto 71). Sin embargo, y cuando los de Juan Ramón Muñiz eran dueños y señores del partido, llegó el 1-2 del Racing, obra de Morris, en el primer y único acercamiento racinguista en los segundos 45 minutos. Aunque el Málaga lo intentó hasta el final, no logró un gol que hubiera evitado la derrota en casa.

El partido comenzó de forma frenética. La primera ocasión fue para el Racing, en concreto para el ex malaguista Geijo, cuyo remate cruzado se fue fuera por poco. La respuesta malaguista llegó a través de Valdo. El leonés cabeceó de forma forzada, en primera instancia. un buen centro de Alberto Luque. Y, a continuación, el interior derecha puso nuevamente en complicaciones al guardameta visitante Toño tras rematar, de cabeza, un saque de banda de Manolo Gaspar.

El encuentro entró en una dinámica de juego espeso, que se vio interrumpido con un remate de Baha en el área pequeña que no pudo conectar con precisión. Seguidamente, Munitis, de cabeza, rozó el poste de la portería defendida por Munúa. Fue un aviso de lo que llegaría un minuto después. Geijo protegió, de espaldas, un balón en las inmediaciones del área malaguista y se inventó un sensacional pase entre líneas para dejar solo a Arana, que batió al meta uruguayo en el minuto 36 de partido. La última ocasión de la primera mitad fue para el Málaga en las botas de Manolo Gaspar, pero su volea, tras un rechace de un córner, se fue fuera.

En la reanudación, el técnico Juan Ramón Muñiz movió el banquillo y dio entrada al malagueño Apoño, que debutada esta temporada tras superar su lesión. El de La Palmilla le dio más movilidad al equipo, que no pudo aprovechar las continuas oportunidades que se crearon en los primeros compases de la segunda mitad, con un Málaga incisivo que siempre llevó la iniciativa. Duda y Obinna fueron los primeros en poner en aprietos a la defensa visitante. El Málaga se la jugó con la entrada al terreno de juego de Forestieri y Edinho. El argentino volvió a ser un incordio para los zagueros cántabros, mientras que el delantero portugués tuvo la primera nada más saltar al campo, tras servicio de Juanito, pero su disparo se fue al lateral de la red. La recompensa malaguista no tardó en llegar. El portugués Duda, que partió de inicio como lateral, anotó de magistral falta directa el 1-1.

Sin embargo, el empate, en lugar de espolear aún más a los blanquiazules, fue el despertar racinguista. En el único acercamiento visitante, los de Juan Carlos Mandía no fallaron. Morris, de cabeza en el área pequeña, consiguió el 1-2 al rematar de manera franca un lanzamiento de falta. Mazazo para un Málaga que siguió insistiendo para tratar de salvar el empate. En la última jugada del partido, ya en el tiempo de descuento, pudo llegar la igualada en una rocambolesca jugada en la que no llegaron a ver puerta ni Edinho, ni Baha, ni Forestieri, y en la que se pidió manos de la defensa santanderina. Finalmente, el marcador no se movió y el Málaga acabó perdiendo su primer encuentro en el Estadio La Rosaleda.




Ficha Técnica: Málaga 1 – Racing 2

Málaga: Munúa, Manolo Gaspar, Weligton, Jesús Gámez, Duda, Valdo, Juanito, Benachour, Luque, Baha y Obinna.

Racing: Toño, Pinillos, Enrique, Morris, Sepsi, Arana, Lacen, Diop, Óscar Serrano, Munitis y Geijo.

Goles
0-1 (36'): Arana. 1-1 (71'): Duda. 1-2 (79'): Morris.

Árbitro
González González. Amonestó, con cartulina amarilla, a los malaguistas Juanito, Benachour y Jesús Gámez y a los racinguistas Morris, Diop, Lacen, Munitis y Xisco.

Incidencias
Estadio La Rosaleda, 21.175 espectadores. Partido correspondiente a la tercera jornada de la Liga BBVA de Primera División
 

depor-malaga
malagacf.com el 13-09-2009, 20:25 (UTC)
 El Málaga mereció mejor suerte en su estadio 'maldito' (1-0)


El Málaga Club de Fútbol sigue sin conocer la victoria en Riazor tras caer derrotado ante los coruñeses por la mínima, virtud al tanto conseguido por Filipe Luis en la recta final del encuentro. Los de Juan Ramón López Muñiz dispusieron de claras ocasiones para adelantarse en el marcador, y posteriormente empatar tras el tanto deportivista, pero no consiguieron batir la portería de Aranzubía y se marcharon sin puntos de un estadio en el que sólo han conseguido un empate en sus nueve comparecencias ligueras.

Deportivo de la Coruña y Málaga Club de Fútbol saltaron al terreno de juego con la intención de asestar el primer golpe a su rival en los primeros compases. No obstante, tras unos primeros minutos de tanteo y aproximaciones coruñesas, los de Juan Ramón López Muñiz presentaron sus credenciales a través de la zurda de Duda, cuyo primer disparo desde la frontal atajó Aranzubía. El propio Duda envió un peligroso envío a Valdo cuyo centro se convirtió en el primer saque de esquina blanquiazul, y minutos después, era Forestieri el que enviaba a Baha en el corazón del área para que su disparo, anulado previamente, hiciese intervenir nuevamente a Aranzubía.

El Deportivo respondió con un peligroso remate de cabeza que se marchó cercano a la escuadra de Munúa. Juca, de disparo cruzado, firmó otra ocasión deportivista detenida por Munúa, antes de que Duda, con otro disparo lejano en el minuto 14, hiciese levantarse a la parroquia coruñesa al enviar el balón al lateral de la red. El peligro cambiaba de área y era el turno de réplica deportivista. Pablo Álvarez y Riki, en dos ocasiones, hicieron intervenir a Munúa por partida triple tras un centro magistral del mexicano Guardado.

Las contras se sucedían, pero el Málaga acumulaba más ocasiones de gol. Un disparo de Valdo dentro del área fue repelido por un defensa cuando el leonés se encontró con un esférico muerto en el área deportivista tras un saque de banda. Pero sin duda, la ocasión más clara del partido llegó tras una falta botada por el portugués Duda en el minuto 26. El luso envió un balón escorado y cerrado en diagonal que Xavi Torres, en el área pequeña, no acertó a enviar, libre de marca, entre los tres palos. Dos minutos más tarde, Turienzo Álvarez señaló un inexistente fuera de juego en un balón repelido por la zaga coruñesa que el marroquí disputó y arrebató a Aranzubía para rematar a puerta vacía.

El Deportivo no perdía el pulso del partido y seguía encimando el área de Munúa, pero la zaga malaguista se mostraba férrea y segura y se interponía a las ofensivas del cuadro de Lotina. El ritmo del encuentro decreció en los últimos minutos, antes de que los jugadores se retiraran a los vestuarios.



Menos intensidad tras el descanso

El encuentro se reanudó con las mismas alternativas que en la primera mitad, pero el número de ocasiones de gol no se incrementaba. Juan Rodríguez dispuso de la primera aproximación, pero su disparo se marchó alto tras aprovechar un rechace de la zaga visitante. Benachour y Adrián López, primeras sustituciones de los dos conjuntos, tomaron protagonismo en los ataques de Málaga y Deportivo, aunque eran los locales los que más apretaban, especialmente a través de Riki.

Lotina dio entrada a Lassad y Mista, y Muñiz a Luque. Valdo centró un pase en profundidad de Benachour, pero no encontró rematador. Lassad, de disparo mordido, hacía lo propio en el área contraria. El partido se mantenía abierto en la recta final, pero fue entonces cuando apareció Filipe Luis. El lateral izquierdo se incorporó al ataque y no dudó en buscar, de disparo duro y certero desde fuera del área, la portería de Munúa en el minuto 82, consiguiendo un golazo imposible de detener para el meta uruguayo del Málaga Club de Fútbol.

Obinna, que estaba preparado para ingresar al terreno de juego, entró tras el tanto y fue protagonista en la reacción malaguista. El nigeriano remató alto en un servicio de cabeza de Weligton al punto de penalti sin oposición. Acto seguido, un envío de Alberto Luque le permitió ganar con velocidad la línea de fondo y servir un claro balón a Baha que, tras haber ganado perfectamente la posición y a puerta vacía, envió fuera en la ocasión más clara del encuentro.

No hubo tiempo para más. El Málaga se marchó con las manos vacías de Riazor, pero la sensación ofrecida por el conjunto de Juan Ramón López Muñiz endulzó, en parte, el amargo sabor de una derrota inmerecida.
 

este domingo vuelve a riazor
eldepor.com el 08-09-2009, 18:20 (UTC)
 Albert Luque no olvida. Ni lo bueno, ni lo malo. Asegura que siempre estará “agradecido” al Dépor y a su afición por los años que pasó en A Coruña, pero sabe que parte de la hinchada no le corresponde. Así se lo demostraron aquellos que le recibieron con música de viento en su última visita a Riazor, la temporada pasada con la camiseta del Málaga. Este domingo le toca volver. “Si creen que me tienen que silbar, que me silben. Si marco gol, no lo celebraré por respeto a la afición que me apoyó durante esos años y a la que siempre estaré agradecido”, afirma. Pero lo cortés no quita lo valiente, y el zurdo avisa de que viene “a por los tres puntos”.

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Dos antiguos deportivistas regresarán a Riazor este domingo con la camiseta del Málaga. Se trata de Munúa y Albert Luque. El guardameta uruguayo pasó con más pena que gloria por A Coruña, pero el atacante catalán vivió tardes de gloria vestido del blanquiazul herculino. Después, sus constantes coqueteos con otros clubes (Barcelona, Atlético, Sevilla y hasta Real Madrid) le granjearon la animadversión de buena parte de la afición coruñesa. Claro que él no hace la misma lectura: “mi salida de allí no fue buena del todo. Fue una cosa buena para el Deportivo, ya que fueron 15 millones de euros para el club en un momento en el que necesitaba el dinero, pero la afición cree que fue por otras cosas”.

Y son esas cosas las que, según Albert, han hecho que un sector de la grada no le tenga en buena estima. “El recibimiento del año pasado no fue muy bueno”, reconoce, “pero si ellos creen que me tienen que silbar, que me silben. Yo iré a por los tres puntos”. El delantero tiene claro que, con pitidos o sin ellos, nunca festejará un tanto en Riazor. “Es un partido diferente. Los goles que he marcado ante el Deportivo los he celebrado jugando en Málaga o en Mallorca, pero cuando he jugado en Riazor, por respeto a la afición que me estuvo apoyando muchos años y a la que siempre estaré agradecido, no los celebro”, explica.

Además, Luque advirtió a sus compañeros del peligro de Juan Carlos Valerón, que ha empezado la temporada en un buen estado de forma. “Es de los tres mejores jugadores con los que he compartido vestuario. Para el Deportivo es un arma importantísima. Te puede dar un pase de gol en cualquier momento. Te puede resolver un partido. Es un jugador a tener muy en cuenta”, destacó.
 

1º partido de liga (malaga- atletico)
as.com el 31-08-2009, 15:58 (UTC)
 Llegaba el Atleti crecido, la Champions en la mano, Agüero embalado. Y el Málaga le bajó a la Tierra en hora y media de trabajo bien hecho, profesional, sin brillantez, pero con inteligencia y, sobre todo, con ganas, muchas más ganas que un rival que pensó que ganaría andando y perdió agonizando. Muñiz, al que se le juntaban lesiones, sanciones y refuerzos de última hora sin aclimatar, arriesgó y todo le salió bien. Además, la fórmula para ganar a este Atleti no es tan complicada: deja el balón en pies de su centro del campo y espera a que invente algo. Será como esperar a Godot: nunca llega.

Porque con las virtudes del Málaga, la mayoría de ellas asociadas a la actitud y la pizarra, se alió ayer la peor versión del Atleti, ese míster Hyde que todo el mundo sabe que existe y Pitarch parece empeñarse en ignorar: el ataque plano y la defensa horrible. Tal vez reaccione hoy y, a pocas horas de que se cierre el mercado, lleguen las prisas y las improvisaciones. Tal vez se vaya Heitinga, llegue Fanni o se busque a toda prisa un medio creativo capaz de ahorrarnos demostraciones de impotencia tan tristes como la de ayer. Tal vez. A 31 de agosto. No ha tenido tiempo antes, claro.

Sólo en una ocasión pudo el Atleti voltear el destino del partido. Fue a los 14 minutos cuando Agüero encontró a la musa por única vez y, tras liársela a Manolo Gaspar se la puso perfecta a Simao, que cabeceó lo que parecía un gol cantado hasta que apareció la mano salvadora de Munúa para desviar al larguero. Además, en el remate, Simao chocó contra Mtiliga, que se tuvo que ir ensangrentado. Por él entró Manu, un chico de la casa, que sería uno de los héroes del día. Empezó de lateral, luego se fue al centro para hacer pareja con el impecable Jesús Gámez y acabó marcando. Lo hizo todo bien, Síganle.

Quitando ese fogonazo, el Málaga vetó su área al Atlético. Siempre ordenado y con una presión inagotable, permitía sin preocupación que su rival tocara diez metros fuera del área. Era como ver a un niño de tres años intentar hacer el cubo de Rubik: gracioso al principio, aburrido después, predecible siempre. Salvo algún disparo lejano, Munúa podía charlar con los recogepelotas.

Una vez asegurada la defensa, el Málaga fue subiendo su apuesta. Cada vez robaba más arriba, Duda sacaba la zurda a pasear con la precisión habitual y Forestieri se presentaba en sociedad demostrando que la fama que le precede por algo. Salvo cuando Muñiz se encargó de chupar plano expulsando a Abel sin necesidad, el protagonismo viró a blanquiazul, aunque el gol llegó por sorpresa. Un balón cruzado al área bastó para desmontar a la defensa atlética, pero el desenlace fue de mucha calidad: Duda la puso al centro de primeras y Baha, que estaba aunque no lo pareciera, se inventó una chilena para alcanzar una pelota imposible de cualquier otra manera. Golazo y al descanso.

Sin reacción.
Nada cambió en la segunda parte. Sin Assunçao, que ha pasado de villano a imprescindible, el Atleti no robaba cerca del área rival, no sorprendía, no encontraba en ventaja a Kun (peleón sin suerte) ni a Forlán (extrañamente ausente). Desde el banquillo, las soluciones eran Jurado y Reyes, con los que Abel no contaba hace dos meses y son ahora las primeras alternativas por falta de competencia. Así que pasó lo que tenía que pasar: sentenció el Málaga.

Duda puso al segundo palo una falta desde la banda izquierda, allí cabeceó hacia atrás Luque, Asenjo no pudo despejar y Manu marcó a placer. De los defensas atléticos, ni rastro. ¿Error aislado? No. Ya en el último instante, el 3-0 fue un calco. Falta desde el mismo sitio, lanzada ahora por un diestro, Benachour, y Xavi Torres cabecea a gol solito en el segundo palo. Asenjo y cía, mal.

Reyes lanzó una falta al palo en la prolongación, pero ya daba igual. La Rosaleda era una fiesta, soñando con otra temporada coqueteando con Europa. Mientras, el Atleti demostró que aún está por hacer. Ayer se juntaron dos de sus recetas habituales para el fracaso: resaca de Champions y virus FIFA. Pero no es excusa. Le faltan recursos y el talento no aparece por generación espontánea. Tic tac, tic tac.

El crack

Manu

El canterano entró por la lesión de Mtiliga, estuvo impecable como lateral y central y, de broche, marcó.



¡Vaya día!

Heitinga

Dentro del desbarajuste general de la defensa, él fue el más despistado y pudo firmar su marcha al Everton.



El dandy

Baha

Apareció una vez, pero fue bastante. Su chilena cambió el rumbo de un partido que estaba aún muy igualado.



El duro

Forestieri

Demostró por qué le auguran un gran futuro, pero se revolucionó y lesionó a Raúl García con una entrada fea.



 

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